Formas baratas de disfrazarse en Halloween
Recuerda que, con todas esas fiestas y luego fiestas posteriores y fiestas por toda la ciudad, Halloween puede alargarse lo que parecen semanas, ¡así que necesitas tener a mano unos cuantos conjuntos de Halloween fáciles!
Ideas fáciles y baratas para disfrazarte en Halloween
Un vampiro
Coge un bote de pintura roja para la cara o el cuerpo y vuélvete loco con ella en la ropa. Ponte una capa si es necesario. Ponte la horripilante «sangre» (estás intentando dar miedo, ¿verdad?) sobre una base pálida para conseguir esa inquietante y pálida piel de vampiro.
Un candidato a la presidencia o al congreso
Todo lo que necesitas es una corbata y una chaqueta de sport, un cartel de «vótame» colgado del cuello y una gran sonrisa falsa permanente, para estrechar las manos de todo el mundo y besar a muchos bebés, ¡y ya estás listo!m
Un pirata
¡Arghh! En este atuendo todo gira en torno a los accesorios. Ponte una camisa de rayas negras o rojas con muchas joyas doradas, un pañuelo negro enrollado alrededor de la cabeza y píntate una intimidante calavera con huesos cruzados en el brazo. No olvides el parche en el ojo.
Un empollón
Engánchate los pantalones hasta más allá de la cintura, abotónate la camisa hasta el cuello y ponte unas gafas. Puntos extra por tirantes y calcetines hasta la rodilla. Pégate las gafas con cinta adhesiva para conseguir el look friki definitivo.
Un pollo
Empieza de blanco. Luego, envuélvete el torso con una boa de plumas -o varias, según lo plumífera que sea- y sujétala con clips. Ponte un par de guantes amarillos de lavavajillas en los pies. Hazte una cresta de gallo -esa cosa roja que llevan las gallinas en la cabeza- con cartulina y pégala a una diadema. Y sal del gallinero.
Gominolas
Este disfraz requiere mucho pulmón. Empezarás en una bolsa de basura transparente etiquetada con «gominolas» en sharpie (o imprime la etiqueta Jelly Belly). Luego, llena la bolsa, en la que estás tú, con globos multicolores del tamaño adecuado. Éstos serán las gominolas. Intenta no reventar ninguna gominola a lo largo de la noche.
Un gato – o cualquier animal con orejas
Este es quizá el disfraz más sencillo de todos. Vístete de negro y hazte con un par de orejas de gato. Si tienes ropa con estampado de guepardo o cebra, úsala y ponte las orejas adecuadas. Hazte con pintura facial para añadirle bigotes y una simpática naricilla rosa. ¡Feliz Halloween!