Terminar una frase con una preposición
Terminar una frase con una preposición se considera una especie de crimen de palabras. En cuestiones de estilo, terminar una frase con una preposición tiende a hacer que la frase parezca y suene torpe. Por ejemplo:
«No voy a escribir una obra de teatro que no pueda protagonizar».
Podría leerse mejor como:
«No voy a escribir una obra de teatro que no pueda protagonizar». En en este caso es la preposición. La regla general es que, al escribir o hablar, hay que evitar terminar una frase con una preposición. La gramática correcta, dicen algunos gramáticos, dice que una preposición debe colocarse siempre antes de un sustantivo o un pronombre
Sin embargo, si no eres capaz de sustituir la preposición al final de la frase sin que suene poco natural, sin duda debes quedarte con esa estructura.
Terminar una frase con una preposición: es cuestión de estilo.
«Sólo hay una cosa en el mundo peor que que hablen de ti, y es que no hablen de ti». – Oscar Wilde
Esto fluye como una frase y la preposición encaja al final de la frase. Si no suena incómodo cuando lo dices o lees el final de una frase con una preposición, no hay nada que te impida utilizarlo. Si suena incómodo, como ocurre en muchos casos, puedes reestructurar la frase para que pierda la preposición al final y suene bastante correcto.
«Es la peor clienta con la que he tenido que lidiar».
«Es la peor clienta con la que he tenido que lidiar». Con es la preposición aquí. Ambas frases son correctas. Es cuestión de lo que te suene bien, o mejor. Realmente no hay reglas estrictas. Se podría argumentar que los gramáticos dirían que la primera frase -con la preposición al final-, pero la segunda frase, que observa la norma de estilo sobre no terminar una frase con una preposición, de alguna manera se lee mejor cuando se escribe. El razonamiento es puramente una cuestión de gusto. La segunda frase suena muy incómoda cuando se pronuncia. La regla general es que, al escribir o hablar, hay que evitar terminar una frase con una preposición. La gramática correcta, dicen algunos gramáticos, dice que una preposición debe colocarse siempre antes de un sustantivo o un pronombre