Karma es una palabra que todos conocemos bien. De hecho, ¡la utilizamos mucho! El karma es una forma de ver el mundo que parece tener todo el sentido. Y es una palabra para la que no existe un equivalente directo en la lengua española, quizá porque se trata de un concepto oriental, y es muy diferente de las creencias religiosas occidentales.

Entonces, ¿qué significa karma?

En sánscrito o hindi, es la palabra que designa la acción. En este caso, «acción» se entiende como la ley de Newton de «toda acción debe tener una reacción». Cuando pensamos, hablamos o actuamos, iniciamos una fuerza que reaccionará en consecuencia. Esta fuerza de retorno puede modificarse, cambiarse o suspenderse, pero la mayoría de la gente no podrá erradicarla. El karma entró en el inglés como concepto religioso en el siglo XIX, en el contexto de las tradiciones hindú y budista. Los hablantes no religiosos utilizan la palabra indistintamente con los términos «suerte» y «destino». También pueden utilizarla para significar «suerte», tanto buena como mala, y actúa como una especie de brújula moral.

BUDDHA KARMA

He aquí algunas de las leyes fundamentales del karma:

1. «Lo que siembres, eso recogerás». Esto también se conoce como la «Ley de Causa y Efecto».
2. Lo que ponemos en el Universo es lo que vuelve a nosotros.
3. Si lo que queremos es Felicidad, Paz, Amor, Amistad… Entonces deberíamos SER Felices, Pacíficos, Amantes y Verdaderos Amigos.

En un tono más ligero, existe un chiste para describir la interacción entre las personas que se aferran a dogmas y creencias rígidas y las que intentan seguir un camino más iluminado: «Mi karma acaba de atropellar tu dogma».